¿Créditos empresa amortizados?

Conocer la definición y el funcionamiento del término “amortización” nos ayudará a entender la gran diferencia de los préstamos para negocio a bajo interés y los créditos personales ordinarios.

La amortización se refiere al proceso de distribución en el tiempo de un valor duradero. Es decir, el valor que genera o pierde en este caso el dinero conforme pasa el tiempo y cómo se distribuye en el tiempo.

 Vamos a poner un ejemplo concreto de los créditos empresa.

Imagina que solicitaste $10,000 pesos y que tienes que hacer 3 pagos de de la cantidad que sea, según los intereses del crédito. Para clarificarlo, cerremos los números y digamos que tendrás 3 pagos de $4,000 pesos.

 

La primera vez pagarás $4,000 y tu deuda de capital será de $6,000. La amortización aquí entra en juego para calcular tu segunda fecha de pago. En lugar de aplicar la tasa de interés al total ($10,000) se hace sobre el saldo insoluto ($6,000) aminorando tu pago de intereses.

No es lo mismo ir aminorando la deuda de los préstamos para negocio a bajo interés y que aunque debas $1,000 estés pagando los intereses de los $10,000 a que solo pagues los intereses correspondientes a ese salgo que aún debes.

En el mercado financiero lo más común es que la decisión de la amortización o no amortización se deba a la cantidad del crédito. Es decir, los créditos empresa o personales muy pequeños no gozarán de la amortización porque no sería rentable para las entidades financieras, debido al riesgo tan alto que implican las pequeñas cantidades.

 

En cambio, préstamos grandes para empresas formales con mucha actividad económica casi siempre son sobre capital amortizado porque el riesgo de que no paguen es menor debido a su historial o los colaterales que puedan presentar. Además de que la amortización abarata los créditos aumentando las utilidades de las empresas.

Un negocio grande tiene mayor ventaja para negociar mejores servicios financieros. Si tu negocio es muy pequeño entenderás que quizá no estés en una posición tan fuerte; sé paciente, seguramente el día de la negociación llegará.

Así que cuanto estés solicitando préstamos para negocio a bajo interés la amortización o intereses sobre saltos insolutos (como también se le conoce) es algo que debes preguntar inmediatamente. Y si tienes entre dos opciones, la decisión se facilitará mucho. Si no te queda opción deberás tomar lo que se te ofrece, pero consciente de que puede haber algo mejor que te dé mayores ventajas, incluso en la misma institución.

A veces se mira de reojo a los créditos empresa, sin saber que esos financiamientos son los que lanzan al éxito a empresas pequeñas y medianas que cuentan con una buena estrategia. Nunca menosprecies la inversión, aunque implique algo de riesgo o esfuerzo extra de tu parte como dueño del negocio. 

Autor: Martin es un escritor de contenido experto. Ha escrito numerosos artículos créditos empresa, préstamos para negocio a bajo interés.